Toma de rehenes en Australia deja tres muertos

Sidney, Australia, a 15 de diciembre de 2014.- 16 horas de terror se vivieron en Australia con la toma de al menos dos docenas de rehenes por parte de un sujeto armado al interior de un café, en la ciudad de Sidney.

Los hechos tuvieron lugar al interior del Lindt Chocolat Café, en Martin Place, en la zona centro de Sidney, donde un sujeto armado, identificado como Man Haron Monis, sometió a los clientes y empleados del lugar, a los que retuvo por varias horas.

Fueron las propias víctimas de Monis quienes denunciaron lo que acontecía al interior del  Lindt Chocolat Café a las autoridades australianas, quienes arribaron minutos después.

Los medios noticiosos, policía y curiosos se arremolinaron en las inmediaciones  del negocio, que en una ventana mostraba una bandera negra con la "Shahada" (la profesión de fe islámica), escrita en árabe, en blanco: "No hay otro Dios que Alá, Mahoma es el mensajero de Alá", que era sostenida por dos de los secuestrados.

Luego varias horas de tensión y negociaciones, cinco personas lograron escapar, tras lo que la autoridad australiana inició el operativo de rescate, abalanzándose sobre el edificio.

Tras múltiples detonaciones de arma de fuego, la autoridad logró ingresar al lugar, resultando muertos el secuestrador y dos víctimas, además de cuatro personas que resultaron heridas.

Al respecto, el primer ministro Tony Abbott, dijo que, "aún no sabemos si esto está motivado políticamente, a pesar de que obviamente hay algunos indicios de que podría estarlo”. 

Y exhortó a la población a no cambiar su estilo de vida: "Australia es una sociedad pacífica, abierta y generosa. Nada debería cambiar eso y por eso urjo a todos los australianos a seguir con su vida como siempre".

Sobre el secuestrador, se supo que este era Man Haron Monis, originario de Irán y un autoproclamado líder musulmán con antecedentes criminales por agresión sexual y complicidad de asesinato en casos separados. Además, fue condenado a 300 horas de servicio comunitario por haber escrito cartas ofensivas a las familias de los soldados muertos en Afganistán.

Cabe señalar que Australia ha jugado un importante papel en las guerras de Estados Unidos en Irak y Afganistán tras los atentados del 11 de septiembre en suelo norteamericano y en la actual lucha contra el Estado Islámico en Siria e Irak, para la que enviaron unos 600 soldados.